Título: El consejero
Título original: The counselor
Director: Ridley Scott
País: USA
Actores:Michael Fassbender, Brad Pitt, Javier Bardem, Cameron Diaz, Penélope Cruz, Goran Visnjic, Dean Norris, Natalie Dormer, John Leguizamo, Rosie Perez, Bruno Ganz, Rubén Blades
País: USA
Actores:Michael Fassbender, Brad Pitt, Javier Bardem, Cameron Diaz, Penélope Cruz, Goran Visnjic, Dean Norris, Natalie Dormer, John Leguizamo, Rosie Perez, Bruno Ganz, Rubén Blades
Año: 2013
Duración: 117'Critico Colaborador: Cristina SC
Calificación:
Grandes actores, gran director, gran guionista y… ¿mala película?
Ridley
Scott nos tiene acostumbrados a hacer películas buenas, pero esta
última, “El consejero” se le ha quedado bastante floja, y
dejando mucho que desear viniendo tanto de este gran director como de
los actores tan sonados que forman el elenco.
Nada más
empezar “El consejero” tiene, en mi opinión, mal acierto en la
traducción del título original, “The
Counselor”, aunque sea la traducción más obvia (como somos
españoles tampoco no nos complicamos mucho al traducir literalmente).
El argumento de “El Consejero” es el siguiente: un abogado
necesitado de dinero (consejero, asesor, llámalo como quieras;
interpretado por Michael Fassbender, amiguito de Scott desde
Prometheus) bastante respetado por la zona del sudoeste
norteamericano que trabaja para un empresario llamado Reiner (nuestro
Javier Bardem ni más ni menos, con un look más que curioso). Reiner
le ofrece a su abogado un “trabajito de nada” que consiste en el
contrabando de drogas (contrabando de drogas en la frontera con
México, nunca habría podido imaginar yo semejante cosa),
concretamente en una carga de cocaína valorada en unos 20 millones
de dólares. Por otro lado tenemos a las chicas; Laura, la novia del
abogado (interpretada por nuestra Penélope Cruz, que me pregunto
cómo de cómodo se sintió Bardem al ver a su mujer en las escena de
sexo de la película) y Malkina, de Barbados y compañera de cama de
Reiner (Cameron Díaz, haciendo un buen papel), completando el elenco
con el aliado de Reiner en el negocio, interpretado por Brad Pitt. La
cosa se complica cuando aparece el cártel de la droga mexicano y
comienzan a complicarse las cosas para este grupo tan peculiar.
Como
argumento la película tiene buena pinta, pero a la hora de verla se
vuelve aburrida y no consigue mantener la atención del espectador
tanto como se esperaría en principio (incluso los minutos menos
interesantes de Breaking Bad enganchaban más que toda la película
junta). Y la verdad es que es una pena que siendo una película que
así por encima parezca buena por el director, elenco de actores y
guionista (el novelista Cormac McCarthy da el salto al guion
cinematográfico) llegue a resultar poco interesante, e incluso
aburrida.
Hay
partes de la película que se pueden obviar fácilmente (no es
necesario ver a Penélope Cruz teniendo sexo oral nada más empezar,
por ejemplo) y así acortar las dos horas que dura. “El consejero”
deja mucho que desear como ya he dicho antes, y la verdad es que
habrá poca gente que realmente disfrute la película o que se
enganche al 100%. Otra cosa que no me gustó para nada es que pongan
a Brad Pitt y demás secundarios aparezcan como principales, aunque
será porque a más de uno si le ponen los nombres de estos actores
irían a verla sin ni siquiera fijarse en el argumento.
Para no sacar sólo defectos (que Ridley me perdone), al menos los actores hacen bien sus papeles. De esto destacaría a Cameron Díaz, que se mete muy bien en el rol de femme fatale y todos están muy bien en sus papeles (aunque unos más que otros, y no quiero mirar a Javier Bardem) y al menos al salir del cine no dejan tan mal sabor de boca en cuanto a interpretación de personajes. Otro detalle interesante es esa escena ¿cómica? De Javier Bardem y Cameron Díaz en un coche, que yo definiría como “curiosa” como poco.
Para no sacar sólo defectos (que Ridley me perdone), al menos los actores hacen bien sus papeles. De esto destacaría a Cameron Díaz, que se mete muy bien en el rol de femme fatale y todos están muy bien en sus papeles (aunque unos más que otros, y no quiero mirar a Javier Bardem) y al menos al salir del cine no dejan tan mal sabor de boca en cuanto a interpretación de personajes. Otro detalle interesante es esa escena ¿cómica? De Javier Bardem y Cameron Díaz en un coche, que yo definiría como “curiosa” como poco.
En
conclusión, tendría que haber muy pocas películas entretenidas en
el cine las semanas que “El consejero” esté en cartelera para ir
a verla, aunque si se es fan fiel de Ridley Scott y los actores que
aparecen llaman la atención seguro que tiene una audiencia y
recaudación decente (después de que costara 25 milloncitos de nada,
qué menos). Esperemos que los nuevos proyectos de Scott sean más
entretenidos o al menos que den más juego en cuanto al argumento.
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